Título: La conjura de Cortes.
Autor: Matilde Asensi.
Editorial: Planeta.
Autor: Matilde Asensi.
Editorial: Planeta.
ISBN: 9788408008033
Año de publicación: 2012.
Año de publicación: 2012.
Páginas: 384.
“La conjura de Cortes” es la última novela publicada por
Matilde Asensi y que cierra su trilogía “Martín Ojo de Plata” sobre el siglo de
Oro español. A modo de una primera toma de posición, y sin entrar a fondo en el
análisis, creo que “La conjura de Cortés” es una novela entretenida, sin
grandes pretensiones y que, por desgracia, quedar por debajo de las
expectativas que un mayor dominio del oficio literario por parte de la autora
podía haber proporcionado. Sin embargo, es justo reconocer que es capaz de
cerrar, condensar y satisfacer todas las expectativas abiertas por la trilogía.
Sin lugar a dudas es una novela cuyo final satisface plenamente al lector que
busca, exclusivamente, una novela de entretenida, que le haga pasar el rato.
Sin embargo, si entramos en una análisis más riguroso y escrupuloso enseguida
resulta notorio que adolece, en mi opinión, de algunos defectos que devalúan,
en cierto modo, mi valoración final sobre ésta, por otra parte, entretenida y,
en algunos momentos puntuales, incluso interesante novela, pero que me da la
sensación que podía haber dado, literariamente, mucho más.
Pero creo que, antes de pasar a
un análisis más exhaustivo de “La conjura de Cortes”, lo más adecuado y
pertinente sería pergeñar, siquiera someramente, una breve sinopsis argumental
de la novela, para situar, si ha lugar, al eventual lector de estar reseña.
Para tal fin utilizaré la recensión de la editorial Planeta, obviamente
laudatoria, en mi opinión en demasía.
“La
conjura de Cortés culmina el recorrido de Matilde Asensi por el Siglo de
Oro español, visto esta vez desde la Nueva España. Una manera de contemplar la
historia que le ha hecho acreedora del reconocimiento de los lectores y la
crítica, y que, cómo no, está plagada de intrigas, corrupción, aventuras e
imaginación.
En esta
novela, Catalina se ve obligada a desenmascarar una gran conjura ideada por sus
enemigos para derrocar al rey de España. La aparición de un mapa que desvela
dónde encontrar el legendario tesoro de Hernán Cortés desempeñará un papel
clave en el plan de Catalina para descubrir a los traidores y cumplir su palabra
de acabar con los Curvo.
La doble
personalidad de Catalina Solís/Martín Nevares se enfrentará además a un grave
peligro para su equilibrio: el amor. Una vez más, Matilde Asensi sorprenderá a
sus lectores con un final inesperado.
Un broche de
oro para la trilogía de Martín Ojo de Plata que siguen millones de lectores.”
En primer lugar
me gustaría reseñar que la trilogía “Martín Ojo de Plata” es una trilogía con
una coherencia interna que ensambla y sirve de hilo de conductor a las tres
novelas que la componen (Tierra firme, Venganza en Sevilla, La conjura de
Cortés), no es, como por desgracia estamos comprobando por otras “famosas”
trilogías que se están vendiendo tan bien, tres libros forzadamente agrupados
en una trilogía. En “Martín Ojo de Plata” podríamos hablar, en cierto modo, de
una extensísima novela en tres partes. He puesto la salvedad “en cierto modo”
puesto que Matilde Asensi, constantemente nos va recordando episodios ocurridos
en las novelas anteriores, probablemente para hacer más fácil la lectura de los
“episodios” sueltos, pero que, sin duda, al menos esa es mi opinión, perjudica
el resultado y la valoración final de la trilogía. Tal vez la autora ha sido
víctima del marketing editorial a la hora de decidirse a escribir una trilogía.
Sin duda alguna, por lo expuesto más arriba, el resultado artístico final
hubiese sido mucho mejor de haber condensado la trilogía en una voluminosa
novela, en tres partes.
Conforme
avanzaba en la lectura de esta novela, no he podido sustraerme a evocar a
autores españoles como Ortega y Frías, Fernández y González o Pérez Escrich.
Sin duda Matilde Asensi bebe de esta tradición decimonónica del folletín
histórico español. Al final de esta reseña, en la parte del comentario,
precisaré mi opinión respecto de la manera de escribir de Matilde Asensi.
Matilde Asensi,
nos plantea la novela con la voz narrativa, en
primera persona en la figura de Martín Ojo de Plata. Es evidente que
está decisión narrativa por parte de la autora será determinante para el
devenir de la narración. Personalmente, y al menos esa es mi opinión, no soy
muy partidario para este tipo de novelas del uso de la narración en primera
persona que lastra y, de algún modo, constriñe el punto de vista a la hora de
narrar un fresco histórico.
En lo que respecta al diseño de los personajes, tengo que reconocer que
ha resultado, por decirlo de alguna manera, desigual. Por lo general Matilde
Asensi, nos plantea unos personajes toscos, en lo que respecta a su
caracterización. Echo de menos unos personajes más “carnales”, que muestren
unos perfiles más poliédricos y, tal vez, menos maniqueos. El personaje central
y protagonista de la novela, así como de toda la trilogía, Catalina y su “alter
ego” Martín Ojo de Plata, me produce una sensación difusa que no me acabo de
creer y que no termina por encandilarme. He reflexionado bastante sobre el por
qué este personaje me ha resultado difícil de creer. Fundamentalmente podría
apoyar esta aseveración en su incoherencia histórica en lo que representaba,
por desgracia, el papel de la mujer en aquella época. Resulta altamente
increíble que su tripulación, enteramente masculina, respetará de ese modo a
una mujer, que por muy travestida que estuviese, a todos les resultaba evidente
su feminidad. Sin embargo, el punto más débil de todo el relato es la
incapacidad de Matilde Asensi para saber narrar de un modo convincente la
“hebra” romántica o sentimental de la novela. Tal vez ese sea el gran handicap
de la autora que, en mi opinión, no ha sabido coger el punto a la narración
“romántica” que se esboza continuamente pero nunca se resuelve.
Por otra parte,
en mi opinión, la autora se pierde en demasiados “meandros” del relato central
que poco o nada aportan a la narración y que, sin duda, distraen y alejan al
lector del relato principal. Por decirlo de alguna manera le llamaría
“digresiones gratuitas”.
Desde un punto
de vista formal Matilde Asensi abusa de los diálogos. De acuerdo, entiendo que
el uso de los diálogos proporciona dinamismo a la narración, pero es que en “La
conjura de Cortes” el uso sobreabundante de los diálogos empobrece
literariamente la narración. Es precisamente este empobrecimiento literario es
la razón por la cual, al principio de esta reseña, emparentaba esta trilogía
con el folletín español del siglo XIX. No puedo resistirme a comentar que, al
leer la novela, me recordaba vivamente a la serie del Capitán Alatriste, de
Arturo Pérez Reverte. Es evidente que Matilde Asensi en esta trilogía es
deudora de Pérez Reverte. Por ejemplo en los usos arcaicos del lenguaje, en la
caracterización de sus personajes, así como el ya referido aire “folletinesco”.
Sin duda está sensación que me producen de “déjà vu” estas dos series de
novelas, sea la formación periodística de los autores. Me explico. Los autores
que provienen del mundo periodístico, excepto algunas honrosas excepciones,
suelen escribir con una prosa demasiado pegada a la crónica periodística...
particularmente me resulta una literatura que, independientemente de que suelen
novelas muy entretenidas, no me acaba de satisfacer ni estilística ni
artísticamente (pero eso ya es una opinión muy personal). Otro punto en el que
me gustaría detenerme, centrándome un poco más en el análisis lingüístico de la
novela, es en el uso arcaizante, en algunos diálogos, del castellano, buscando
emular e imitar el lenguaje del siglo de Oro. Loable intento éste, que duda
cabe, pero que junto con expresiones bastante ajustadas a la época, la autora
desliza expresiones que dudo muchísimo que se utilizasen en aquella época. Echo
de menos, también, tratándose de una novela con sabor marinero, la poca
utilización de un léxico tan rico, extenso y prolijo como es el propio de la
marinería, que es un todo submundo dentro del léxico de nuestro idioma. En ese
aspecto me parece que hace un uso paupérrimo del lenguaje, que se prestaba,
hablando con la propiedad que se presupone a las gentes de mar, a un
desbordante “mar” de palabras del léxico de las gentes de la mar. Llegados a
este punto, no me voy a resistir a citar, textualmente, un interesante
fragmento que nos muestra una curiosa etimología:
“—Un hurakan —porfió—. Ah, perdonadme. Es una palabra
maya, el nombre de uno de nuestros antiguos dioses, el dios que, con su
aliento, creó la tierra. Nosotros llamamos hurakan a esos grandísimos vientos y
grandísimas lluvias que provocan tempestades muy excesivas y destruyen los
pueblos, arrancan los árboles y hunden las naos levantando el agua hasta los
cielos”.
En “La conjura
de Cortés” Matilde Asensi cierra el circulo de la trilogía y, honradamente,
creo que lo hace de un modo bastante correcto, dados los mimbres que sustentan
la novela, satisfaciendo las expectativas del lector. Aunque en mi opinión, con
mucha diferencia, la mejor novela de toda la trilogía es “Venganza en Sevilla”.
Como ya comenté
un poco más arriba, me ha distanciado un poco en la lectura de “La venganza de
Cortes”, las continúas referencias que Matilde Asensi hace de circunstancias
acaecidas en novelas anteriores. Entiendo, por una parte, que estas referencias
sirven para recordar al lector determinados hechos, pero su uso, en algunos
momentos abusivos, en mi opinión, distancian y ralentizan la acción. Supongo
que todo esto viene por esa división forzada de esta historia en tres novelas y
por el hecho de intentar hacer “leíbles”, y por tanto “vendibles”, las novelas
independientemente, de modo que sean lo más inteligibles posibles. Del mismo
modo que critico esa división artificial por parte, probablemente, de la
editorial Planeta, no me duelen prendas en destacar la magnífica y muy cuidada
edición de la trilogía “Martín Ojo de Plata” por parte de Planeta.
Por último y
para no extenderme ya mucho más, en la reseña de esta novela y entrando, más
propiamente, en la parte del comentario, tal y cómo anunciaba al comienzo de la
reseña, me gustaría añadir unas palabras sobre la escritura de Matilde Asensi.
Creo, honestamente, que la autora está muy lastrada, a la hora de su estilo
literario, por su profesión periodística y ese estilo propio de su profesión.
El uso sobreabundante de los diálogos, si bien puede parecer adecuado a una
novela de “acción”, de “aventuras”, me parece exagerado, así como su narración
demasiado “periodística”. Personalmente echo de menos una mayor elaboración
literaria y una más cuidadosa planificación formal y estilística. “La conjura
de Cortes” creo que es una novela entretenida y amable de leer, pero que, por
desgracia, no me aporta nada y probablemente dentro de un tiempo no dejará ningún poso en mí y es una pena,
porque Matilde Asensi creo que tiene capacidad para dar el salto y abordar
novelas con mayor calado y ambición literaria. Y precisamente si me muestro
exigente con esta autora es porque creo que puede dar mucho más de sí,
abandonando este camino de literatura fácil (de leer y especialmente de vender)
por el que ha elegido desarrollar su carrera literaria.
Dicho todo lo
cual, creo que, tras valorar con la mayor honestidad posible y siendo fiel a mi
conciencia y a mi manera de entender el arte literario, creo que la valoración
que haría más justicia a la novela “La conjura de Cortes” de la escritora
alicantina Matilde Asensi, sería de un 6,25/10.
© Luis Alberto Cao
No he leido ninguno de estos libros que forman la trilogìa, pero con tus comentarios, me hacen pensar, que los tendrè encuenta para pròximas lecturas.
ResponderEliminarun fuerte abrazo
fus
Muchas gracias amiga Fus, como siempre, por tus comentarios. Es un placer contar con seguidoras como tú. Un beso
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEstimado Bachiller,hoy navegando me he topado con su blog. ¡que buen trabajo¡ lo leeré atentamente y lo colocaré en mis favoritos.Muchas gracias.
ResponderEliminarHablando de Matilde Asensi: solo he leido una obra suya,"Venganza en Sevilla" y he de decir que me resulto entretenida sin más,por eso me cuesta empezar a leer esta que usted reseña hoy.Supongo que será,más o menos parecida.un saludo
Muchas gracias amiga Begoña por tus cariñosas palabras, es un placer para mí que me tengas entre tus favoritos. Un beso muy fuerte
ResponderEliminarUna crítica muy amable, en mi modesta opinión. Para mí es, sin duda, una de los peores novelas que jamás haya leído (y ya peino canas).
ResponderEliminarLa caracterización de los personajes es burda. El estilo pretendidamente arcaizante del lenguaje es deplorable. Si ya rechinaba bastante en las novelas de Reverte, aquí alcanza los niveles del más absoluto patetismo. No hay tensión alguna en la trama. Nada en esta novela es creíble y, por ello, nada puede interesarnos.
Es la primera novela que leo de Matilde Asensi (bueno, para ser justos debo reconocer que he sido incapaz de acabarla). Y es también la última que leeré. Seguro.