Título original: The history of love.
Autora: Nicole
Krauss
Traducción:
Ana María de la Fuente
Editorial:
Salamandra.
Colección: Letras de bolsillo.
ISBN: 978-84-9838-002-6
Páginas: 288.
“A veces, yo pensaba que la última
página de mi libro y la última de mi vida habían de ser la misma, que
cuando mi libro terminara yo terminaría, que un vendaval barrería mi casa
llevándose las páginas y, cuando todas esas hojas blancas salieran aleteando
por la ventana, la habitación quedaría en silencio y mi silla estaría vacía”.
(La historia del amor. Nicole Krauss)
“La
historia del amor” es la segunda novela de la escritora norteamericana
Nicole Krauss (su primera novela fue “Llega un hombre y dice”), texto que ha
venido precedido de unas críticas que ofrecen una valoraciones muy dispares y
en algunos casos, casi, antitéticas. Precisamente esa disparidad de opiniones,
tan radicales en algunos casos, ha sido, entre otras, la razón por la que he
decidido leerla con espíritu crítico y analizarla con todo detalle.
En primer
lugar, como es habitual, y como toma inicial de posición ante “La historia
del amor”, me gustaría precisar, de un modo ineludible, algunos puntos
previos. He tenido que tomarme un largo período de reflexión, porque me he
sentido bastante desorientado tras su lectura, por decirlo de un modo un poco
brusco, inmediatamente después de su lectura me quedó la duda de si se trataba
de “una obra maestra” o de “una tomadura de pelo”. Precisamente por ese motivo,
he vuelto a leer por segunda vez la novela con un mayor rigor crítico y
teniendo a mano los apuntes tomados en mi primera lectura. Tras esta segunda
lectura, depurativa, y después de ese
obligatorio período de reflexión y análisis, tan necesario para despojar y
tamizar esas impresiones antitéticas incompatibles con un análisis literario
serio, y después de una semana desde que cogí el libro por primera vez, creo
que ya puedo sentarme ante el ordenador para redactar este análisis sobre “La
historia del amor”.
A modo de una primera toma de posición
me gustaría apuntar que se trata de un texto tremendamente denso y complejo de
leer, fundamentalmente por esa enrevesada estructura narrativa que obliga a un
esfuerzo adicional, en algunos momentos titánico, por parte del lector. En mi
opinión, creo que este exceso de “barroquismo” termina por resultar superfluo y
excesivo. Da la sensación que la autora ha querido escribir una novela “de
culto” y para reforzar esa percepción ha querido presentarnos un texto deliberadamente,
alambicado. Y al menos, esa es mi opinión, la auténtica obra de arte se apoya
en la sencillez, en esa capacidad de los grandes artistas de hacer sencillo lo
difícil y no al revés. Sobre todo
porque la técnica literaria no tiene que ser un fin en sí mismo sino, más bien,
un vehículo en aras a contar una historia (y no para entorpecerla). Pero, más
adelante, ya entraremos en un análisis mucho más pormenorizado de éste y de
otros aspectos de la novela.
Como suele ser habitual y,
fundamentalmente, con el fin de situar al eventual lector de esta reseña en el
ámbito de temático en el que nos movemos, creo que lo más pertinente y adecuado
será pergeñar, aunque sea someramente, una breve sinopsis argumental de la
novela “La historia del amor” de Nicole Krauss, para lo cual vamos a citar,
textualmente, la reseña que, con este fin, nos presenta la propia editorial
Salamandra.
“Leo Gursky, cerrajero polaco
jubilado en Nueva York, cuya obsesión es «no morirme un día en que nadie me
haya visto», recibe misteriosamente el manuscrito de un texto que creía
perdido, acompañado de una enigmática carta. Instalado en el ocaso de su vida,
esta sorpresa lo lleva a bucear en los recuerdos de su lejana juventud,
recuperando emociones que suponía enterradas. No muy lejos de allí, la
quinceañera Alma Singer padece los dilemas y conflictos de su edad. Hace ya
ocho años que su padre murió de cáncer y ella ha decidido que es hora de que su
madre deje de estar triste, o sea, se dispone a encontrarle un nuevo marido.
Cuando en su camino aparece La historia del amor, una novela rara, escrita en
yidis, publicada en español y comprada por su padre en una librería de Buenos
Aires, los interrogantes se suceden. ¿Por qué su padre se la regaló a su madre
muy poco después de conocerla? ¿Quién era su autor? ¿Y quién es el misterioso
hombre que ha encargado a su madre que traduzca el libro al inglés? Como en una
afinada composición musical, la intensidad de la historia va aumentando
progresivamente hasta que los pasos del anciano que busca reconciliarse con su
pasado y la adolescente que quiere poner remedio a la soledad de su madre se
entrecruzan mediante una ingeniosa y compleja trama cuyos hilos convergen en un
final inolvidable. Con un tono intimista y envolvente, la autora ha logrado lo
más difícil, contar una verdadera historia de amor en el sentido más amplio y
profundo de la palabra, una historia llena de pasión y melancolía que conmoverá
a todo tipo de lectores.”
Voy a empezar, propiamente, esta
reseña permitiéndome contar una pequeña anécdota al respecto. “Dicen que salían
del cine dos amigos, después de ver una película de arte y ensayo, y uno le
dijo al otro: - Esta película debe ser magnífica, porque, la verdad, no he
entendido nada”. Tras esta anécdota, por llamarla de alguna manera, pienso que
se esconde una gran verdad. Intentaré ser lo más sistemático posible a la hora
de abordar el estudio y análisis de la novela. Para lo cual empezaremos
estudiando su arquitectura narrativa. La división formal de la novela es en capítulos
y en cada uno de los ellos aparecerán diferentes voces narrativas que nos irán
relatando, de ese modo perspectivista la trama de “La historia del amor”.
Aparecen claramente tres voces narrativas claramente independientes y
diferenciadas,: la de Leopold Gursky,
la de Alma Singer y la de Zvi Litvinoff. En todos los casos los narradores
utilizan el tiempo pretérito y además es especialmente reseñable y meritorio
como la autora distingue, por su forma de escribir y expresarse, a los
narradores. Esto último resulta especialmente evidente en el relato de Alma
Singer que estilísticamente diverge
ostensiblemente de los demás (no entraré en un minucioso análisis porque
desbordaría excesivamente la finalidad de una reseña literaria, acercándose más
a un comentario de texto). Por otra parte, la autora nos presenta un relato
acronológico que, francamente complica aún más su lectura y comprensión. Pero,
aún hay más, durante toda la novela Nicole Krauss nos va introduciendo
fragmentos de la novela “La historia del amor”, en un segundo nivel
narrativo, que, en mi opinión, poco o nada aportan al relato central de la
novela, sino que únicamente sirven para desorientar aún más al lector.
Finalmente al final de la novela tendremos una nueva voz narrativa, a partir de las páginas del diario de Bird
(el hermano pequeño de Alma). Profundizando en el análisis se pueden constatar
algunos errores e incoherencias que, obviamente, en un texto tan farragoso,
desde un punto de vista formal, sería poco menos que milagroso que no aparecieran.
En cualquier caso “La historia del amor” no soporta un análisis
profundo, intentando desenmarañar la madeja, porque tiene muchas lagunas,
incoherencias e imprecisiones.
Otro de los problemas que, en mi
opinión, complican la lectura de este libro es que la autora da por supuesto
que el lector está familiarizado con la cultura y las tradiciones judías. Para
intentar comprender la novela he tenido que detenerme, con mucha frecuencia,
para buscar en Internet multitud de términos. Echo de menos una edición más
cuidada, con notas a pié de página para facilitar la comprensión de la novela
o, cuanto menos, un glosario final. Está aculturación que da por obvia la
autora, evidentemente no es así.
Sin duda alguna el mérito principal de
esta novela es el personaje de Leo Gursky. En esta creación la autora sí
consigue emocionarnos, por momentos, con su convincente diseño. Un personaje de
carne y hueso, con personalidad, que consigue atraparnos e introducirnos en su
compleja psicología de hombre desengañado, abandonado y solitario. Por así
decirlo, la novela se sustenta en todo el relato de este personaje, porque,
honestamente, los otros relatos, en mi opinión, quedan muy por debajo de éste.
Por otra parte el resto de los personajes no están, ni muchos menos, a su
altura. Particularmente me ha decepcionado como la autora trata, por decirlo de
alguna manera, al personaje de la madre de Alma, que, sin duda alguna, queda
infravalorada siendo tan importante en el desarrollo de la trama de la novela.
También me gustaría que el lector reparase, muy especialmente, en el personaje
de Bruno, el amigo de Leopold. Tras el estupor que me produjo este personaje en
la primera lectura, su segunda lectura me ha corroborado su absoluta
incoherencia.... y no digo más.
Por otra parte, y ya entrando en la
parte del análisis de la propia trama que sustenta la novela, en líneas
generales me ha decepcionado, porque en muchos casos las situaciones están muy
forzadas, muy metidas con calzador, así como, también, esa sucesión de hechos
más o menos casuales que, insisto, violentan en exceso la propia coherencia
interna, imprescindible en un texto literario. Sin embargo, “La historia del
amor” es un claro homenaje a la literatura que desborda de detalles que
denotan, sin duda alguna, que la autora es una gran enamorada de la literatura.
Me ha llamado la atención que en un momento dado de la novela la madre de Alma
está leyendo a Cervantes. La novela vuelve a explorar, una vez más, el tema de
la sublimación de nuestra gris y desesperanzada existencia por medio de la
literatura y su capacidad para subsumir la realidad.
A modo de resumen y para no alargarme
mucho más, creo que “La historia del amor” es un texto excesivamente
presuntuoso por parte de la autora. Una novela, probablemente, escrita con la
intención de convertirse en una “novela de culto”, incluso me atrevería a decir
pedante, para lo cual Nicole Krauss ha complicado todo lo que ha podido una
historia que narrada de un modo menos “pretencioso” podía haber resultado una
hermosa novela. Como reflexión final me gustaría decir que, teniendo en cuenta
las cosas positivas de la novela, que por supuesto las tiene, Nicole Krauss, no
debería a estas alturas de su incipiente carrera literaria haber buscado una
estructura narrativa tan complicada que, sin duda alguna, se le va
completamente de las manos.
Dicho todo lo cual y en atención a
todo lo referido a lo largo de la presente reseña e intentando ser lo más fiel
a mi manera de entender el arte literario, creo que la puntuación que más
ajustada a la novela “La historia del amor” de la escritora norteamericana
Nicole Krauss, sería de un 5,75/10.
© Luis Alberto Cao
(Para ilustrar la reseña os dejo un video de la entrevista que se le hizo a Nicole Krauss ha propósito de la publicación de su novela "Great House")